Para el ahorro de agua en un huerto hay que realizar un acolchado, llamado mulching. Para efectuar esto, hay que cubrir el suelo con una capa de material orgánico.
Todo esto conlleva en el suelo del huerto:
1) Aporte de nutrientes.
2) Reducción de la erosión.
3) Control de la humedad.
4) Mejora de la estructura.
5) Incrementos de la actividad biológica.
6) Reducción de plantas silvestres.
Los materiales que se usan para llevar a cabo un acolchado son por ejemplo paja, heno, hojarascas, hierbas, etc.
Lo que hace esta capa es proteger al suelo de las condiciones climáticas no beneficiosas, como insolaciones estivales, heladas invernales, lluvias torrenciales y viento. Favoreciendo la absorción de agua y limitando la evaporación.
El momento ideal para hacer un mulching es finales de primavera y principios de verano.
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